Se inicia ayudando al cliente en definir el sistema de gestión que necesita implementar.

El proyecto se divide en cuatro (4) etapas: el diagnóstico, donde se identifican las brechas entre la forma de trabajo actual y la norma correspondiente; luego se procede a relevar y documentar los procesos, ajustándolos para que cumplan con la norma a implementar; en paralelo se procede con la implementación, la misma que incluye la capacitación al personal de la empresa sobre interpretación de la norma correspondiente, así como la capacitación en los procesos definidos; finalmente, se coordina la auditoría de certificación, la cual suele darse en dos etapas, la primera es a nivel documental, y la segunda es una revisión en campo.